Gareth Bale no saldrá del Real Madrid este verano. El galés tiene claro que cumplirá su contrato, con fecha de expiración en verano de 2022, y aunque no cuente para Zidane, seguirá en la plantilla.
El problema para el club de Chamartín es de los de época, y es que con una de las fichas más altas del equipo, el expreso de Cardiff pretende ganarle el pulso a Florentino Pérez y a su entrenador.
Pese a las presiones para que abandone la entidad, Bale se muestra firme en su decisión de seguir a toda costa y lo que es peor, el Real Madrid no puede hacer nada para deshacerse de él, salvo que aceptase liberar su ficha y dejarlo marchar gratis, decisión que empieza a valorarse en la zona noble del Bernabéu.
Jonathan Barnett, agente del futbolista, ha confirmado que su representado no se va a mover este verano, respondiendo así a Zidane una vez más y tensando todavía más la cuerda entre cuerpo técnico y jugador.