Franck Kessié aparece entre los objetivos del Inter de Milán para reforzar su línea medular, sobre todo en el caso de no conseguir finalmente a Arturo Vidal.
El futbolista del Milán lo ha disputado casi todo con la escuadra neroazurra este año y la realidad es que no tiene recambio, por lo que la intención es no traspasarlo.
Pese a todo, aún no ha renovado y su contrato expira en 2022, por lo que el Inter espera convencer a su eterno rival a base de talonario.
La idea de Conte sería sumar al pivote marfileño este mismo verano, ya que no pudo conseguir su contratación para el comienzo de este curso. Para ello, ofrecerían una cifra próxima a los 20 millones de euros, aunque tampoco se descartaría una cifra menor y la inclusión de algún jugador.
La pelota está sobre el tejado del Milán, que tendrá que valorar las opciones de mercado y ver si puede reemplazar al africano.