Debido a las numerosas críticas recibidas por parte de los clubes, que se veían en inferiores condiciones que el resto de Europa en materia de fichajes, la Premier League ha rectificado para recuperar la fecha antigua de cierre de ventana de transferencias, que al igual que en el resto de países del viejo continente será el próximo 1 de septiembre.
Así, a diferencia de este pasado verano, los clubes ingleses podrán mover ficha hasta el último día y si algún equipo les quita a alguno de sus futbolista, tendrán el mismo margen de maniobra que el resto de países.