Thomas Lemar llegó al Atlético hace una temporada como refuerzo estrella para el ataque tras abonar una importante suma al Mónaco por su traspaso, 72 millones de euros. Un año después, su rendimiento sigue en duda y lo que es peor, apunta a una inminente salida.
El francés no ha conseguido encontrar su sitio en el once de Simeone y con la llegada de los nuevos apenas tiene sitio. Teniendo en cuenta su alta ficha y su pobre bagaje, su salida se antoja obligatoria para la dirección deportiva rojiblanca, que no descartaría incluso un adiós este enero.
El Atlético escuchará ofertas por el extremo galo y además, ya le habría comunicado al agente del futbolista que la situación no pinta muy bien, recomendándole incluso iniciar la búsqueda de un nuevo destino. El gran problema para los rojiblancos, que ahora mismo Lemar no vale la suma que se pagó por él.